lunes, 20 de octubre de 2008

LIBERTAD CON V

LIBERTAD con V
…¡Qué bien me falseaste! Te preguntarás por que te digo esto. ¿Recuerdas el día de las nupcias… me prometiste que volaría libre? Aún no sé, lo que significa para ti esta palabra tan hermosa, claro, que libertad con uve de victoria te viene grande.
Lava que te lava, barre que te barre. ¡Aquí ando, como la chacha! Todo el día limpiando, y cuando he terminado llega el viento y en una cabriola arrastra tras sí, las hojas secas ¡que tendrías que haber recogido del jardín! esparciéndolas sobre la madera de estos viejos muebles con olor a rancio, y otra vez, a volver a empezar. Y tú llegas, ni una leve caricia de tus suaves manos, ni un cálido susurro de tus ardientes labios, ni una mirada cómplice de tus negros ojos, solo un grotesco ademán y me preguntas.
(Qué has hecho de comer, coloca rápido el puchero que vengo desmayado)
Estúpida de mí, que vuelo a disponer las viandas en la mesa. Claro, para dirigir a tu banda de música te falta tiempo. Para mí, ni un pequeño suspiro, y sí, un reproche si la comida no está en su punto. Y por si fuera poco, me traes una iguana ¡con el miedo que me dan los lagartos! Y ahora te pregunto ¿Qué es la crueldad brutal?
Maltratar a un animal, o ser un pedazo de animal.
Un largo ronquido se deja oír en la paz sigilosa de la noche.

1 comentario:

republica_motril dijo...

Que razon llevas con este pequeño relato. Los hombres... los hombres somos unos vagos, unos desagradecidos por todo lo que haceis, de todo lo que os encargais, de los niños, de la casa, de trabajar, os desvivis por nosotros, y luego la mayoria son tan y como lo relata este escrito, llegan y se tumban a no hacer nada, no ayudan en casa, no tienen buenos gestos, se ve que con trabajar ya somos la salvacion... ¡basta ya de machismo, de reproches!
(incluyo a todos los hombres y que conste que yo soy un hombre, aunque no este tipo de hombre). Un saludo.