sábado, 31 de enero de 2009

VILLA CÉLULA

VILLA CÉLULA
Hace mucho, mucho tiempo yo no existía,
la célula de papá se acopló a la de mamá
y de esa unión nací yo.
¡Pero!... ¿queréis saber como ocurrió?
os lo cuento como a mi me lo contaron.

Estando el Espermatozoide de papá tranquilamente con sus hermanos,
sintió una gran tromba que lo llevó impulsado.
—¡Socorro, socorro!— pero nadie acudía en su auxilio ¡de pronto!
—¡oooh! que casa tan preciosa.
La morada era redonda (medía entre una y veinte micras) gozaba de un nombre
VILLA CÉLULA, rodeaba la casa una muralla.
— ¡Muralla, muralla—llamó— permitirme entrevistarte!
— ¡No!— contestó tajante.
—Por favor, déjeme pasar.
—Bien, pero antes dime cómo te llamas.
—Yo.
—¡Si, tú!
— Espermatozoide.
—Bien, bien, me gusta tu nombre, yo me llamo Membrana Plasmática,
te dejaré entrar igual que dejo al agua, los gases, las sales minerales…
— ¡OH! gracias—aplaudió nuestro pequeño héroe.
Se apartó la puerta y nuestro amigo quedó alucinado. Rodeando la habitación principal y ocupando el resto de la casa residía un líquido donde habitaban los distintos trabajadores. Este líquido tenía un nombre (escribió que no olvidara decirlo, estaba muy orgulloso de el) se llamaba Citoplasma.
Temiendo que Espermatozoide agrediera la casa, se presentaron los guardianes.
—¡Alto, alto! ¿Quién va?
—Espermatozoide.
—Nosotros somos los guardianes, nos llamamos Lisosomas, nos encargamos de la digestión de VILLA CÉLULA y de matar a los intrusos.
—Pero—lloraba el pequeño— ¡yo no soy un intruso! soy un amigo.
—Conforme, puedes pasar, pero vigila para no perderte.
Nadando en el líquido Citoplasma nuestro viajero llegó al Aparato de Golgi,
( era el almacén regulador de la casa) como no le gustó el sitio siguió el camino. A la vuelta de una curva se apostó a observar…cuantas carreteras, eran larguísimas, salían al exterior de VILLA CÉLULA se llamaban RETÍCULO ENDOPLASMÁTICO, se utilizaban para transportar materiales de desecho al exterior. Marchó rápido no lo confundieran y lo lanzaran fuera. Advirtió lo importante que era el trabajo que realizaba cada uno de los trabajadores.
En su largo recorrido pudo ver en una de las habitaciones depósitos de diferentes contenidos llamados VACUOLAS E INCLUSIONES.
Llamó su atención un sirviente, CENTROSOMA, cada vez que VILLA CÉLULA quería desplazarse acudía a CENTROSOMA.
Después de mucho circular espermatozoide se encontraba fatigado, se sentó; al poco un ruido procedente de una habitación despertó la curiosidad, era RIBOSOMA trabajaba fabricando proteínas.
—Que maravilla—pensó—como me gustaría quedarme, pero ¿qué ocurre, cuanto aire? me estoy asustando.
— No tengas miedo, es MITOCONDRIAS está respirando y a su vez obteniendo energía.
— ¿Quien eres?
— NÚCLEO y soy la habitación más importante de la casa—expresó pavoneándose—dirijo toda la actividad y contengo la información para crear al humano, poseo todos los caracteres hereditarios de la persona ¿quieres ponerte en contacto conmigo?
—De veras—preguntó incrédulo— ¿me permites entrar en tu habitación?
—Estás seguro que quieres entrar.
— ¡Si!
—Pues…adelante.
Lo que allí ocurrió otro día os lo contaré.

1 comentario:

republica_motril dijo...

Buen trabajo a la hora de relacionar las distintas partes del óvulo. Como bien está el recorrido que el espermatozoide hace a lo largo y ancho del óvulo hasta que es "invitado" a la sala central... ¡ya tenemos criatura!